La dieta de los weight watchers promete bajar el peso lenta y saludablemente con ayuda de un programa flexible. No existe un alimento que esté prohibido. ¿Creíble? Fitness.com demuestra lo que se esconde detrás del concepto motivación en grupo y explica su lado positivo y negativo.
Unidos todo es posible, entonces bajemos juntos los kilos demás. Las personas en todo el mundo se motivan unas a otras, se dan consejos e intercambian experiencias cuando se encuentran en una reunión de weight watcher.
El sistema lo desarrolló la ama de casa newyorkina Jean Nidetch, ella intentó bajar de peso sin resultados satisfactorios en los años 60 –no lo logró, le faltaba un apoyo un consejo. Decidió entonces comunicar sus expectativas, experiencias y consejos con gente en su misma situación con el fin de motivarse mutuamente. Muy pronto los kilos empezaron a bajar y weight watcher había nacido.
El programa de weight watcher no es en si una dieta sino más bien un concepto de alimentación completo. Se puede comer todo lo que uno desea. Lo único que no se debe es pasarse del máximo puntaje calculado. Este valor es personal y depende del peso, edad y sexo.
Weight watchers ofrece un libro de consejos el cual comprende todos los alimentos y bebidas indicando el puntaje máximo especial. Estos valores representan la cantidad de calorías de los alimentos y la composición de sus sus substancias nutritivas. Lo interesante son los carbohidratos, las grasas y las proteínas. Los weight watchers son severos sobre todo con los porcentajes de grasas, el puntaje es bastante alto, mientras que todas las frutas y verduras no tienen puntaje alguno. Este método permite las pastas y batatas sin ningún límite. Los alimentos que llenan rápidamente son importantes para evitar estar con hambre durante la dieta y recurrir a los alimentos dulces a escondidas. Con ayuda de esta dieta se pretende bajar entre 500 y 1000 gramos a la semana.
Fuente: Fitness
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