Hay días en los que estamos tan hinchadas que corremos el riesgo de parecer embarazadas. Esto se puede deber a la retención de líquidos, gas o constipación. Éstas son algunas formas de evitarla.
Come mucha fibra.
Cuece tus verduras. Así te darán los mismos nutrientes pero ocuparán menos espacio en tu intestino.
El café te puede irritar el estómago, provocando hinchazón. Reduce tu consumo diario sustituyendo una taza por té.
El potasio ayuda a regular los niveles de líquido en tu cuerpo.
El tragar aire te provoca hinchazón. Evita masticar chicle y tomar líquidos con popote.
Evita los carbohidratos antes de cenar porque te hacen retener líquidos y te levantarás más hinchada.
A algunas personas los sustitutos de azúcar les provocan gas. ¡Fíjate si eres una de ellas!
Las bebidas carbonatadas te inflan el estómago. Sustitúyelas por agua de sabor.
Los probióticos encontrados en varios lácteos te ayudan a evitar el estreñimiento.
Recuerda tomar agua (especialmente si estas comiendo fibra).
Reduce la sal de tus alimentos.
Fuente: ActitudFem
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